Gallego de nacimiento y corazón, el de O Barco de Valdeorras, a orillas del Sil, sabe que ir despacio, pero disfrutando del camino, apreciando lo importante, siendo consciente de cada paso, ir ‘amodiño’, en definitiva, va a transformar radicalmente la temporada verde. Se acaba una primera parte dura, complicada, que ha empañado injustamente lo logrado en un año 2022 que ha sido excepcional. Este sábado toca decirle adiós, tomar un respiro después, meditar y regresar para jugar todo lo que queda por delante, que es mucho y lo más importante del curso. Jorge Fernández, cuya trayectoria profesional es brillante, no escurre el bulto, no oculta nada del sentimiento común de la plantilla, pero es optimista.
El central ha sido claro: “Tenemos que ser realistas para saber que no hemos hecho una primera vuelta a la altura de este club; Unicaja Costa de Almería está hecho para estar entre los dos o tres primeros siempre y nosotros hemos acabado séptimos”. Sí, ha habido “momentos buenos”, pero no suficientes, “sabemos que no estamos jugando al nivel que tendríamos que jugar, no estamos encontrando una regularidad”, dicho textualmente, “y eso es lo que tenemos que trabajar para intentar cambiar en esta segunda parte, que al final es la más importante”. Y no es cuestión solo de ‘mala costumbre’ del club, sino que los jugadores de la plantilla tampoco están habituados a finalizar tan abajo una vuelta.
En ese sentido, Jorge Fernández ha recordado que el equipo “está hecho con jugadores que están acostumbrados a estar en los puestos de arriba, así que ni el club ni tampoco nosotros estamos habituados a perder seis partidos en una primera vuelta”, literalmente. Así, “es algo que no es fácil de asimilar cuando no estás acostumbrado y la dinámica de la cabeza te hace pasar un momento duro, pero todos juntos tenemos que cambiarlo, que aprender y saber lo que tenemos que hacer para mejorar”. Queda claro que club y plantel son dos partes de una misma cosa, con un idéntico sentimiento, y por ello se cerrará filas incluso más de lo que se ha venido haciendo estas pasadas semanas de competición.
El gallego hace un balance realista, pero constructivo: “Los seis que hemos perdido han sido todos muy igualados y hemos salido con la sensación de que, haciendo un poquito más, podríamos haber ganado prácticamente todos”. Esto se ha producido en el contexto de “una liga muy igualada, con un equipo más fuerte a estas alturas, que es Guaguas, y lo está demostrando, pero contra ellos hicimos un partido de tú a tú”. El resto “está muy igualado, y si nosotros hacemos las cosas bien sigo confiando en que seremos capaces de darle la vuelta a esta situación, sacar una buena segunda vuelta, que es la parte más importante de la temporada junto con la Copa del Rey”. No hay motivos para tirar la toalla.
El sufrimiento experimentado hasta ahora debe ser un arma: “Claro que todos queremos cambiar esta situación, a todos nos duele estar donde estamos y lo primero que tenemos que hacer cada uno es una autocrítica y pensar qué puede mejorar para el beneficio del equipo, y a partir de ahí todos juntos trabajar duro, tirar del carro e ir a muerte a por todos los partidos, es lo único que podemos hacer”. En resumen, “saber la situación en la que estamos, saber lo que hay que hacer para cambiarla y hacerlo de verdad”. Lo primero es Boiro, “jugar contra gente de tu tierra siempre es bonito”, lamentando que “Boiro este año va a sufrir mucho, porque ha tenido problemas económicos y los fichajes no han salido”.
Fernández ha añadido que “está en una dinámica mala” a poder jugar “solo con gente de allí”, si bien ha destacado el mérito del club: “Es gente muy jovencita, pero el club trabaja muy bien la cantera, y les va a venir bien como club para seguir creciendo con la gente de allí, año para aprender y para disfrutar de los partidos que tienen esos chicos jóvenes”. Que nadie piense por ello que al Moisés Ruiz vendrán pensando que no tienen opciones, encabezados por Del Carmen: “Gabi es un gran jugador, lo ha demostrado sobradamente en la Superliga, a nosotros nos hizo 24 puntos, un partidazo en el inicio de la liga”. Por él y por resto, “no podemos esperar un Boiro que vaya a venir sin ganas, todo lo contario”.
No va a ser un partido fácil, “van a venir súper motivados, jugar contra Unicaja te da un plus de motivación, y ellos no tienen absolutamente nada que perder y eso los hace muy peligrosos”. Como siempre, es mejor mirar tu lado de la red: “Es verdad que si nosotros somos capaces de hacer las cosas bien deberíamos ganar sin aparentes problemas, pero no podemos pensar en eso, sino esperar un partido duro ante un rival más”. Será el 1.001, una cifra que el central valora en su justa medida: “Mil partidos es una barbaridad y está claro que a día de hoy Unicaja Costa de Almería es el club más importante de España, o por lo menos el de más historia, y eso es algo muy difícil de conseguir en el voleibol”.
El segundo capitán ha dado la enhorabuena al club por tal consecución, deseando “que sean muchos más”. En cuanto a 2022, “acaba de una manera un poco agridulce, porque se han producido estos últimos resultados, pero ha sido buenísimo, campeones de liga, y tenemos que quedarnos con eso y pedir que 2023 va a rendir de la misma forma que 2022”. Por lo tanto, es una cita para que nadie se la pierda, y ha hecho su llamamiento a la afición: “Siempre está con nosotros, en las buenas y en las malas, y esperamos todos que siga siendo así, porque la verdad es que la necesitamos para darle la vuelta a esta situación; además, son de todos los 1.001 partidos de Unicaja y los celebraremos juntos”.