Justo un año después la historia se escribió al revés. La victoria ahorradora para su undécima Copa del Rey en Melilla tuvo la respuesta del sexto entorchado turolense en Palma. Fue, una vez más, un partido que hace afición, que sirve de reivindicación para el voleibol y que pudo ganar cualquiera. El pulso fue durísimo, y en él, conforme avanzaba el choque de trenes, tomó partido la grada, agradecido Unicaja Costa de Almería por el apoyo del público local. Son Moix arropó a los blanquiverdes y no se pudo corresponder con una victoria, porque el tie-break salió cruz por primera vez en la temporada. Hubo opción de estirarlo un poco más, pero no se pudo y se cayó con honor. Después de la acumulación de partidos y viviéndose el segundo quinto set consecutivo, las energías llegaron justas, pero llegaron, en una batalla magnífica de todos los jugadores, los mismos que ahora deben pasar página y pensar en la CEV Challenge Cup. La temporada no cesa y los retos siguen siendo atractivos.
Verdes y naranjas reeditaron sus ya ‘viejas’ batallas para deleitar al público presente en el coliseo palmesano y a los telespectadores con un voleibol de alto nivel y su prácticamente idéntico potencial, siendo el bloqueo aragonés el que posiblemente marcó la diferencia. Apareció a ráfagas en el partido, pero fue determinante en el desempate, sumando los dos centrales dirigidos por Rivera más que todo Unicaja. Así, el más destacado en esa faceta fue Bugallo, con 5, seguido por Plak, con 4, en un total de 9 frente a los 7 del equipo completo de los de Berenguel. El máximo en cuanto a puntos fue Pablo Kukartsev, imponente en su juego para repetir los mismos 28 puntos que el día anterior y firmar un total de 56 en el torneo. En recepción brilló de nuevo Ferrera, también espectacular en defensa, como Aarón Gámiz, lo que le valió al líbero del cuadro aragonés ser designado MVP de la final. Pero de entre todos, el más completo, un Jorge Almansa que sumó 5 puntos directos de saque.
El capitán tiró del equipo, recibió muy bien y defendió lo imposible, sumando un gran registro de 17 puntos con un 61% de acierto atacante. De capitanes fue la final, ya que el recurso en los momentos delicados para CV Teruel sigue siendo un eficaz e incombustible Thomas Ereu. Y es que la cosa no fue de números, por mucho que sea lo que dicta el paso, en gran medida, en este deporte, sino por las sensaciones, con orgullo del perdedor y del ganador. Así, se desarrolló un primer set acabado en 24-26 y que mostró que ninguno de los adversarios iba a ceder absolutamente nada. Tocar todas, en bloqueo o en defensa, en uno y otro lado de la red. A Unicaja Costa de Almería le faltó hacer punto al menos un porcentaje más elevado de las pelotas que interceptó sobre la divisoria. Comenzó centrado el cuadro almeriense, Almansa avisando al saque con un ace y un penalti aprovechado por Jean Pascal. Se llegó a tener una renta de tres puntos (10-7 y 12-9), nivelado en el 18-18, lo que se vivió hasta el 21-21. Cogió la delantera Teruel, Unicaja levantó una bola de set, pero no la segunda para un final agónico con 24-26.
El segundo set repitió, y mejoró los números del primero, puesto que el 2-0, otra vez con Almansa siendo letal, se fue a un 4-0 y a un 5-1 que, sin embargo, contrarrestó el cuadro aragonés (5-5). Se puso, de hecho, dos por arriba con un 6-8 por errores en el ataque. Pidió tiempo Manolo Berenguel y se reordenó la cabeza para empatar a 10, bloqueo de Jean Pascal, y a 13, un puntazo de Kukartsev haciendo mejor una gran defensa de Ferrera. Unicaja Costa de Almería se puso por delante con un ace de su opuesto, Teruel tiró de Ereu y volvió a la delantera, pero no se iba a dejar un bravo Unicaja Costa de Almería, líbero felino incluido y jugador letal a tono. Hage bloqueó el 23-19 y Fran Iribarne entró al saque para cerrar el set en 25-20 con un punto directo. Se empezaba de nuevo y se repitió la igualdad en un inicio de tercer set (3-3), con una primera ventaja de Unicaja (5-4) en un penalti de Jean a saque de Nick Amado. En todo caso, con 5-8 Berenguel solicitó un tiempo.
Le sirvió para apretar hasta otra serie de empates que se rompiron con un 10-9 de los verdes, obra de Hage. Se peleó, pero no se tuvo suerte pese a las defensas de algo nivel ejercidas (11-13). Se rompió el set, pero se tuvo el coraje de otra vez tocar a la puerta (de 12-16 a 17-17), tirando del carro Almansa y Kukartsev, más error de Gavenda. Después de todo lo remado, no se pudo gestionar en el final y se fue la manga en un 20-25. El cuarto set se inició con tres errores seguidos de Teruel en su saque, lo que aprovechó Unicaja Costa de Almería para apretar con el suyo, con una extraordinaria serie de Almansa, que rompió la recepción aragonesa hasta el punto de doblar los verdes a los naranjas en el tanteo (14-7). La marcha siguiente fue de control blanquiverde, con más error rival al querer apretar en el saque para una remontada que no pudo lograr, pese a maquillar el tanteo final hasta el 25-20.
El tie-break estaba servido, uno más, el séptimo de la temporada, pero no fue una ‘séptima maravilla’. En el principio pegó primero CV Teruel, e hizo bueno ese dicho de que quien pega primero, pega dos veces. De hecho, eso marcó la diferencia al respecto de los anteriores, en los que Unicaja Costa de Almería había entrado con mando. El 0-2 de principio no se pudo levantar en ningún momento, pese a que se estuvo cerca e incluso se pudo empatar a ocho con saque, una vez más, de Jorge Almansa, y a diez. Faltó el último aliento para superar el bloqueo turolense, y el muro naranja se elevó y subió un 11-14. Se rozó la proeza de levantarlo, con Fran Iribarne entrando al saque, pero con 13-14, y después de que otra defensa al límite fabricase una opción de alargar el partido, un nuevo bloqueo sentenció que la Copa se iba a Teruel. Brillante final la ofrecida, mucho en positivo para los verdes pese a la derrota, con conjura previa y con repaso posterior insistiendo en la idea de que la cabeza se debe llevar bien alta, emocionados con haberse ganado el aliento de la parte ‘no naranja’ de un templo lleno de ‘feligreses’ muy entendidos en voleibol.
FICHA TÉCNICA
Unicaja Costa de Almería (2): Almansa (17), Jean Pascal (7), Kukartsev (28), Guilherme Hage (9), Amado (3) y Huang (1) más Mario Ferrera (líbero). También jugaron Marlon Palharini (-) y Fran Iribarne (1).
CV Teruel (3): Víctor Rodríguez (3), Bugallo (10), Gavenda (23), Ereu (17), Plak (8) y Jukoski (3), más Gámiz (líbero). También jugaron César Martín (-), Jordi Ramón (-) y Dani Ruiz (-).
Árbitros: Carlos Alberto Robles (Valladolid) y David Fernández (Barcelona).
Parciales: 24-26 (32’), 25-20 (26‘), 20-25 (27‘), 25-20 (27‘) y 13-15 (18‘).
Incidencias: Partido correspondiente a final de la XLV Copa del Rey de Voleibol en su edición de 2020 disputado en Son Moix ante unos 2.500 espectadores. El MVP de la final fue el líbero turolense Aarón Gámiz.