Ahora es el tercero el que recibe al segundo, que a su vez ha sido capaz de sostener el factor cancha. Eso significa que Ushuaïa Ibiza Vóley solo puede aspirar en su Es Viver a regresar al Moisés Ruiz, y que Unicaja Almería tiene ‘tres partidos de final’, si bien ese justo es el mensaje del que se ha huido durante toda la semana verde. No se admite otra cosa que no sea disputar un encuentro con el mismo ritmo que si fuese el último de la temporada, búsqueda firme de la ‘vía rápida’ para evitar que la calidad de Ibiza se vea acompañada de la misma confianza con la que llegó hasta las puertas de la semifinal. Tenía motivos para ello tras desplegar un brillante juego durante toda la segunda vuelta, y de hecho rozó la victoria en la primera batalla de la eliminatoria, viéndose muy tocado tras el 35-33 del arranque del segundo choque.
La guerra psicológica es parte de este deporte, y más cuando las fuerzas están tan niveladas como es el caso entre ahorradores e ibicencos, por lo que a los de Manolo Berenguel les parece fundamental no permitir ‘ninguna esperanza’ tras el 2-0 con el que se han afianzado firmemente en la serie. A su favor está también el mayor grado de experiencia en la disputa de los play offs, algo sobre lo que puso el acento Piero Molducci al término del primer fin de semana en la que fuera su casa durante tantos años. No, no es lo mismo la fase regular que la lucha definitiva por el título, y no es igual llegar tras victoria que encajar una doble derrota, si bien Ushuaïa Ibiza Vóley no se arrugó, ni mucho menos. Más bien fue en gran medida que se topó con una versión mucho mejor de Unicaja de la que le había visitado apenas unas semanas antes. Con reducción máxima de la capacidad de sorpresa, el pulso ahora será puro.
En Es Viver los ahorradores se van a encontrar un extraordinario ambiente, como siempre, e incluso más caldeado. Por un lado, el club pitiuso ha puesto en práctica la política de ‘puertas abiertas’ para no restar ni un ápice la afluencia al pabellón, y por otro está la más que justificada ilusión que los de Molducci han despertado en la isla, pensando que este año sí les toca estar en la final. Evidentemente aún puede ser, pero desde ya es ‘ahora o nunca’ al haberle dejado Unicaja sin margen de error. El otro argumento de peso para estar totalmente concentrados desde el mismo inicio es la notable subida de nivel como local que experimenta el conjunto balear, mucho más cómodo en su casa tanto en el saque, su gran arma, como en la distribución de balones, siendo potentes tanto por las puntas como por el centro.
Ante todo esto se plantará un bloque blanquiverde que todavía tendrá la baja de su capitán Jorge Almansa, pero que ha hecho real lo que tantas veces se ha repetido: hay una plantilla larga y capacitada para entrar en pista en cualquier momento, y a la misma no le falta el carácter para afrontar los momentos difíciles. El impulso que ha supuesto el buen comienzo del play off ha sido la pieza definitiva que hacía falta para que la máquina funcione a pleno rendimiento. Sí, Unicaja Almería va a más a medida que se acerca a la gloria, que se conseguirá o no, pero por la que luchará hasta el límite obligando a quien quiera ganarle a alcanzar y sostener la perfección. La orden de ‘no error’ se cumplió a rajatabla y la actitud es la adecuada. El viernes quiere pasaporte a la final y dos semanas de preparación, y no escatimará esfuerzo.
En cuanto a Ushuaïa Ibiza Vóley, todo hace indicar que repetirá con su equipo de gala en el inicio del primer encuentro, con César Martín mucho más cómodo en su casa que en la ajena y seguramente más ‘apoyado’ por el potente saque local. Tapia será el gran referente atacante, si bien por el centro Elvis de Oliveira y Sugrañes esperan tener balones si la recepción se lo permite. Enorme nivel ha dado el ex de los verdes, Juanmi González, en esa faceta de juego, al igual que en defensa, si bien ha atacado menos que Héctor Salerno, mucho más utilizado por el colocador. Es verdad que en Almería la recepción no llegó como debía, incluso poniendo Piero al opuesto Borges en esa posición en el segundo partido del Moisés Ruiz.
No contó con demasiada confianza por parte del italiano el internacional Gabriel del Carmen, que sí que entró a pista pero en una dinámica de superioridad de los verdes que era muy complicada de anular. Por el centro actuó, y lo hizo bien, Monteagudo, en cuya rotación en saque se atascó el conjunto de Berenguel. Sin embargo, no surtió el efecto oportuno la salida de Cesinha para darle respiro a César Martín, con irregularidad en los balones servidos a sus compañeros. El saque ahorrador, sin dar demasiado riesgo, fue suficiente para poner en dificultades a los pitiusos y al líbero Francisco Fernández, que solo dejó sitio puntualmente a Víctor Sánchez y que fue a más entre los dos partidos disputados.
Otra vez esta posible doble contienda será el viernes desde las 20.30 horas y, de ser necesario, el sábado desde las 18.00 horas, como en Almería. La dirección será de los catalanes David Fernández y Joaquín Ventura, que se intercambiarían la silla el sábado si Ibiza vence el viernes. Habrá rivalidad máxima, pero bien entendida.
COMPETICIÓN | Superliga Masculina de Voleibol |
JORNADA | Semifinal 3 / (Semifinal 4) |
PARTIDO | Ushuaïa Ibiza Vóley – Unicaja Almería |
HORA | 20.30 / (18.00) |
DÍA | 12 de abril de 2019 / (13 de abril de 2019) |
LUGAR | Es Viver |
ÁRBITROS | David Fernández / Joaquín Ventura (viceversa si es necesario) |
Otra | 1/2 | Superliga Masculina de Voleibol | 2018/2019 |
12/04 | 20.00 | Urbia Vóley Palma – CV Teruel | Son Moix |
(13/04 | 18.00 | Urbia Vóley Palma – CV Teruel | Son Moix)** |