superliga masculina de voleibol
Asentando un estilo

Activación on-line del ‘plan de cantera’ de Unicaja Costa de Almería para un modelo de juego único de sello verde

Manolo Berenguel realiza videoconferencias semanales con los chicos de categorías inferiores y sus entrenadores, avanzando la ‘teoría’ para una “aplicación en cascada” de los sistemas del primer equipo de SVM


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Estilo propio, identificable para los demás, que facilite el paso a la categoría de edad inmediatamente superior sin trauma para el jugador y con sencillez de adaptación a la hora de poner sobre la cancha una idea propia de vóley, la de Unicaja Costa de Almería. Como no, y visto lo visto, también se trata de una medida muy importante para realizar con éxito entrenamientos conjuntos, o llamada de canteranos a alguna sesión del primer equipo, o de un cadete a ejercitarse con los juveniles, por ejemplo. El concepto de ‘cascada’ es básico para el futuro de una entidad que se ha definido siempre por la calidad de sus bases y que avanzó al principio del confinamiento su determinación de reactivación de ese ‘poder canterano’. El club ahorrador no se ha parado durante este tiempo, sino que ha aprovechado la coyuntura para avanzar lo que resulta más ‘tedioso’, la teoría, tanto del voleibol como del sistema de juego.

Tratándose de una ‘caída’ de conceptos desde lo más alto, desde el primer equipo de Superliga, que vaya ‘empapando’ a todos los jugadores de las actuales y futuras categorías inferiores del club, porque es realmente un proyecto de futuro, ha debido ser el propio Manolo Berenguel, cúspide de los técnicos de la casa, el que ejecute el inicio del plan. No se lo toma, ni mucho menos, como una obligación, siendo más que un amante confeso del voleibol formativo, en el que ha obtenido extraordinarios resultados deportivos para Unicaja, pero también para el voleibol español. Tan solo hay que ver la foto de hace ahora una década, la de aquel campeón de la Superliga Junior de 2010, con el nijareño dirigiendo a un grupo de chicos de los que muchos no solo han llegado a la máxima categoría, sino que lo han ganado todo de verde o con otros colores, y que además han nutrido a la Selección Española. El trabajo de Berenguel, en aquel momento, fue ‘crear jugadores’, todos ‘jugones’, con sentido de equipo y de qué iba este deporte, a la postre no pocos de ellos ‘jugadores de élite’.

Aquellas enseñanzas adquiridas en el seno del club ahorrador han sido como un tesoro para estos hombres, pilares sobre los que han culminado su crecimiento y que suponen el sustento de su juego, una vez llegados a lo más alto. Pero aquella foto fue un pico más del iceberg, porque la formación había comenzado, y seguía a la par, en los equipos de inferiores categorías. Esa línea se ha recuperado ahora y es tan fuerte la apuesta por ella que no se ha dejado escapar el tiempo. Tan es así que se ha ‘aprovechado’ el confinamiento para realizar sesiones semanales teóricas sobre vóley y sobre la adaptación en la que el primer entrenador está trabajando. A la cantera de Unicaja Costa de Almería se la conocerá por un sistema de juego con ‘sello verde’, o sea, los más pequeños jugando como el Superliga, con adaptaciones propias a su edad, por supuesto, lo que ya están interiorizando gracias a ‘lo on-line’.

Tras una primera reunión dedicada a la preparación física se ha pasado a la parte técnico-táctica, reconociendo Manolo Berenguel la importancia, en todo caso, de la entrega de “herramientas personalizadas para el mantenimiento de los chicos”. Así, en aquel momento compareció también Enrique de Haro: “Les explicó la adaptación que había hecho para ellos de los planes de entrenamiento que había mandado al primer equipo, en una videoconferencia que aclaró en qué consistía el trabajo que se debía hacer, los tipos de ejercicios, las sesiones, cómo tenían que gestionar todo eso, ya que estaban en la etapa de confinamiento puro y duro, sin salir a la calle, y sin nada de material a su alcance; si alguien tenía una goma o algo así, bien, y si no, pues nada, con su propio peso”. No va a ser la única, ya que el técnico sabe de la importancia de que se haga correctamente esa preparación física, sin peligro para los jugadores: “Más adelante haremos otra para ver la evolución de los chicos”.

Promovida esa faceta de mantenimiento, se ha abordado con otras tres sesiones la parte ‘teórica’ antes referida, de las que Berenguel está saliendo muy animado y de las que lo más importante es que una incita a otra, dado el interés mostrado por los participantes: “La primera fue una especie de coloquio, con muchas preguntas, con dudas sobre el primer equipo y propias de temas técnicos y tácticos; estuvieron muy participativos, preguntaron e intenté aclarar todas las dudas que tenían; como los vi muy animados, y eso que entiendo que es complicado asimilar un rato de teoría del juego, se ha seguido con grandes avances”. En todo caso, “se intenta hacer lo más ameno posible, sabiendo que solo quieren pista, pista y pista, pero les convenzo de que es importantísima la teoría para después llevarla a la práctica y ellos responden, valga la expresión, con más preguntas”. Es motivo de orgullo del club el carácter tan proactivo de los actuales miembros de sus categorías inferiores.

Comprobado el interés y la involucración de los chicos, se pasó a lo siguiente, como es la referida “adaptación del modelo de juego que tiene nuestro equipo de SVM a ellos, manejando que además están mezclados en las sesiones las dos categorías de las que dispone el club actualmente, cadetes y juveniles, lo que se procurará ir ampliando a corto y medio plazo”. Por ahora, se ha comenzado a “unificar criterios y los más pequeños los están asimilando sin problema”. En definitiva, la idea es la ya expuesta: “Que se vayan familiarizando con esto, porque les digo que en el caso de que necesite un jugador para echar una mano en el entrenamiento del Superliga, vendrá con las ideas básicas necesarias para que no se interrumpa la dinámica de la sesión, sabrá dónde tiene que estar, la responsabilidad que tendrá”. No solo ese es el motivo, sino “la idea es que el club tenga un mismo modelo de juego, y eso se avanzará con los entrenadores de cantera más adelante, si bien lo adaptarán a las características de sus jugadores, sin perder la idea de que en esas categorías tienen que saber hacer de todo y entrenar de todo”.

Hasta la fecha, la adaptación del modelo de juego del primer equipo está siendo de gran interés por parte de los chicos: “Es un monólogo mío, pero les dejo que hagan preguntas, que interrumpan mientras analizo el modelo de juego que tiene el SVM, y el modo de que ellos lo apliquen también”. Está yendo por fases, y ya saben los conceptos de saque y recepción, “aspectos técnicos, tácticos, pautas psicológicas, puntos básicos que son ‘cosas mías’ en esas dos facetas del juego, dejarles cosas claras, como que en vóley en único momento en el que tienes el control absoluto del balón es en el saque, o la importancia del ritual de cada jugador, la concentración que deben tener”. En recepción, “más adaptación si cabe, porque nosotros tenemos unas líneas más avanzadas, recibir de dos, otra de dos más uno, otra de tres, o en algún remoto caso recibir de cuatro; les explico que depende, les simplifico, les quito varias variantes, pero saben ya reconocer zonas y tendencias del sacador, manejar las ‘zonas de conflicto’ entre receptores, o quién coge el corto y quién el largo”.